se me explotan los muertos, las células, el cuerpo. el aire de la vertiente de agua estaba lleno. la paz del cielo inerte caía a lo oscuro, como si permanecer en lo bajo, en el fondo tuviese color. te esperé 20 horas en la cima pero te olvidaste el cuerpo. pretendías llevarme por el puente atemporal que une tus días con mis ganas de ver más. guardé en mi estómago los abrazos que no te dí. hoy aplastan mi pecho hacia afuera me clavan palabras en el centro del punto muerto que no quiere morir.